Embarazo y PTI

La trombocitopenia inmune primaria (PTI) puede cambiar muchas cosas de tu vida, pero afortunadamente no te impide quedarte embarazada o tener un bebé perfectamente sano.

Oct 25, 2021

El diagnóstico de la patología trombocitopenia inmune primaria (PTI) puede acarrear muchas preguntas acerca del embarazo y de ser madre, como: ¿Puede la enfermedad afectarnos negativamente a mí y a mi bebé durante el embarazo? ¿Qué tengo que considerar, qué puedo hacer? ¿La PTI es hereditaria?

Esta patología autoinmune puede cambiar muchas cosas de tu vida, pero afortunadamente no te impide quedarte embarazada o tener un bebé perfectamente sano. Sin embargo, la situación requiere una atención especial y una estrecha coordinación entre el hematólogo, el obstetra y el pediatra de la mujer para garantizar un resultado positivo.

Curiosamente, los recuentos bajos de plaquetas son una parte normal del embarazo, incluso para quienes no tienen un diagnóstico primario de PTI. De hecho, la trombocitopenia a menudo se descubre durante el embarazo y se ha observado en el siete al diez por ciento de todos los embarazos.

Estos recuentos bajos de plaquetas deben controlarse durante el embarazo. De esta manera, los especialistas pueden decidir si es necesario un tratamiento o una adaptación de la terapia existente.

A la hora del parto, las mujeres con PTI tienen preocupaciones adicionales por un recuento de plaquetas adecuado para el parto (50.000 por microlitro o más) y para un procedimiento epidural (más de 75.000 por microlitro). La mayoría de los médicos recomiendan mantener un recuento de plaquetas por encima de 20.000 a 30.000 plaquetas por microlitro durante el embarazo y por encima de 50.000 a la hora del parto.1 

No hay evidencia de que una cesárea sea más segura para el bebé en una madre con un recuento de plaquetas bajo, por lo que la decisión de tener un parto vaginal o una cesárea debe basarse en el mejor método de parto dadas las circunstancias de la madre.

Otra de las grandes preguntas es si la PTI es heredable, y no, no es una patología de carácter hereditario. Sin embargo, es posible que los anticuerpos de la sangre de la madre pasen a la sangre del bebé, por lo que el recién nacido también puede tener un recuento bajo de plaquetas. 

En la gran mayoría de los casos, estos valores bajos solo necesitan ser monitorizados, no tratados. En lo que respecta a la lactancia materna, no existe evidencia de que ponga en riesgo al recién nacido, según la asociación intercontinental de organizaciones de apoyo al paciente de ITP. 

Referencias